martes, 23 de febrero de 2016

CAFEÍNA Y DEPORTE

Al hablar de cafeína, estamos hablando de una de las sustancias más consumidas en el mundo, aunque no sea un nutriente esencial en la alimentación. En la práctica deportiva, es usada como ayuda ergogénica, y está incluida en numerosas bebidas.


El Comité Olímpico Internacional (COI) establece como legal, un máximo de 12 microgramos, por cada mililitro de orina. A esta cantidad, llegaremos ingiriendo unas dosis superiores a 9mg/kg. Esto equivaldría alrededor de 6 tazas de café.

En un estudio de 1990, Wilcox, concluyó que hasta esa fecha existían pocas investigaciones en las que se estudiaban los efectos de la cafeína. A partir de esa fecha, comienzan a aumentar los estudios sobre los beneficios que provoca la cafeína. De este modo, se llega a demostrar su ayuda ergogénica.


EFECTOS BENEFICIOSOS DE LA CAFEÍNA.

Es un estimulante del Sistema Nervioso Central (SNC). Por esto, aumenta la comunicación entre células nerviosas o neuronas. De este modo, la cafeína tiene la capacidad de anular o reducir la somnolencia, aumentando nuestro estado de alerta y concentración.

Se mejora el rendimiento deportivo, sobre todo en entrenamientos o competiciones, superiores a una hora de duración. Esto es debido a que se produce un efecto excitante de las contracciones musculares.

Su beneficio es doble, dado que también ocasiona una mayor resistencia a la fatiga.

¿CUÁNDO TOMAR LA DOSIS DE CAFEÍNA?
Si queremos que la ingesta de cafeína sea lo más eficiente posible, es muy recomendable tomar esta dosis una hora antes del ejercicio. Además es muy importante, continuar ingiriendo pequeñas dosis de cafeína, conforme vaya apareciendo la fatiga.

No obstante, el café no es la mejor opción para la suplementación de cafeína para atletas. Esto es debido a que su contenido en esta sustancia es muy variable, y cabe la posibilidad de que tengan presencia de químicos que perjudican el rendimiento deportivo.