jueves, 13 de marzo de 2014

DURABILIDAD Y CAMBIO EN LA CADENA DE UNA BICICLETA DE CARRETERA

Son muchas las personas que practican el deporte del ciclismo en ruta, tanto desde un modo popular y de aficionado, hasta en la modalidad profesional. En esta entrada vamos a tratar, la cadena e intentaremos ver cada cuanto tiempo debemos cambiarla.

La cadena, es un instrumento de nuestra bicicleta, que al igual que ocurre con los frenos sufre un gran desgaste. La fuerza imprimida con nuestro miembro inferior, es transmitida a los diferentes desarrollos, que son los que hacen que movamos la bicicleta y avancemos con ella.


Para controlar el desgaste, existen unos medidores. Los digitales son los más precisos, pero no los más económicos ya que son caros. En cambio existen otros medidores, más rudimentarios y que pueden adquirirse por 5 o 10 euros en cualquier tienda especializada de ciclismo. Estos medidores miden la distancia entre los eslabones de la cadena y de este modo nos muestran el desgaste de la cadena. El resultado puede ser 0,75, este resultado nos indicará que la cadena se encuentra estirada un 75%. Cuanto más estirada se encuentre más cercanos estará el momento de cambiarla.

Los fabricantes de bicicletas, recomiendan cambiarla a los 2500-3000 km en MTB y a los 4500-5000 km en bicicletas de carretera. No obstante, la forma más exacta de conocer cuando debemos realizar el cambio de la cadena es conocer su grado de estiramiento. Para ello utilizaremos los medidores vistos anteriormente. El momento en el que debemos cambiar la cadena es entre el 75 y 55% de su estiramiento. Es decir, cuando el medidor nos muestre entre 0,55 y 0,75.



No obstante, todo este proceso dependerá de nuestro modo de usar los desarrollos y el tipo de material de cadena que llevemos.

En el siguiente enlace podemos ir al video que nos explica cada cuanto cambian los profesionales sus cadenas en su bicicletas.

http://www.youtube.com/watch?v=6pQXAbmhf54&list=HL1394723136

El mecánico del Cofidis Team explica brevemente cada cuántos kilómetros cambian la cadena en las bicis de los profesionales y ofrece unos consejos de mantenimiento para los ciclistas habituales y cicloturistas.

martes, 11 de marzo de 2014

SEGUIMIENTO Y CONTROL DE UN DEPORTISTA.

Son muchas las ocasiones en las que se realiza un seguimiento a un deportista, pero que no siempre sabemos explotar esos datos que obtenemos.

A continuación se muestra una hoja de registro, utilizada en un control de 10 días, y con los parámetros que debemos de controlar, porque pueden ser grandes indicadores de sobre-entrenamiento o deshidratación.


Ahora una posible valoración de los resultados que hemos obtenido en el seguimiento. Debe realizarse diariamente, para ser capaces de conocer cuando comienza el periodo de sobre-entrenamiento por ejemplo y modificar nuestra planificación. Sino interpretamos y valoramos estos datos nuestro trabajo de seguimiento no valdrá para nada.
 
En cuanto a los resultados, podemos comprobar que el jugador en estos diez días, realiza dos sesiones de descanso. Los entrenamientos de su club, son un total de 5. El jugador realiza dos sesiones por cuenta propia. Finalmente cabe destacar la disputa de un partido.
En lo que respecta al entrenamiento; las sesiones de mayor intensidad, coinciden con los entrenamientos de su club. Trabajan las capacidades físicas de resistencia a la velocidad, potencia anaeróbica láctica, y capacidad anaeróbica láctica. Estas se combinan con entrenamiento técnico y táctico.
Las sesiones de mayor intensidad, se producen al comienzo de la semana, y en el transcurso de esta va disminuyendo la intensidad de los entrenamientos pre-escritos, con el fin de llegar descansados al día de la competición.  Estas sesiones de comienzo de la semana, el entrenamiento suele centrarse en un aspecto más físico, mientras que la última sesión de la semana, antes de la competición, se realiza una sesión de entrenamiento para el componente táctico y específico de tiro a canasta.
En cuanto a los indicadores de fatiga y recuperación; su percepción del esfuerzo, parece corresponderse con la intensidad preescrita del entrenamiento. Una vez que ha transcurrido una hora, después de la sesión el sujeto ha bajado de las 100 pulsaciones por minuto, aun así esta sigue bajando hasta la hora de dormir.
Su peso no varía mucho respecto al que se tomó el día anterior al comienzo del control. Podemos destacar que los días que despierta con menor peso, su color de la orina, suele ser oscuro o muy oscuro, esto podría ser síntoma de deshidratación.
Podemos señalar que la calidad del sueño y la cantidad de horas de sueño, favorecen a disminuir sus pulsaciones. Esto sucede así porque cuanto más tiempo duerme y mejor descansa, más bajas son sus pulsaciones al día siguiente. Las horas de sueño están rondando las 8 horas que se recomiendan todos los días.
Finalmente, destacar que los entrenamientos de mayor intensidad favorecen el descanso y que tenga menor número de pulsaciones por minuto al despertar. Esto puede suceder por la fatiga que ese tipo de entrenamiento provoca en el sujeto, pero que tiene buena capacidad para recuperar.